Hiperhidrosis o exceso de sudoración: El uso de la toxina botulínica de forma repetida aumenta la duración de su efecto.
La hiperhidrosis o exceso de sudoración afecta al 1-3% de la población, por igual a hombres y mujeres. Es más frecuente en la edad media entre los 24 y 64 años. Es una alteración que ocasiona una repercusión importante en la calidad de vida de las personas a quien afecta.
¿Que tipos de hiperhidrosis existen?
Existen dos tipos de hiperhidrosis la primaria o idiopática (sin causas subyacentes) y la secundaria o asociada a otras enfermedades (diabetes, parkinson, enf de tiroides, ingesta de ciertos medicamentos, etc).
Suele afectar a una zona determinada (hiperhidrosis localizada) en el 90% de los casos pero también puede ser generalizada. Las zonas más frecuentemente afectas son las axilas, palmas, plantas, frente y pliegues inguinales.
El sudor es producido por las glándulas sudoríparas ecrinas que están inervadas por unas terminaciones nerviosas colinérgicas que liberan acetilcolina y pertenecen al sistema simpático paradójicamente.
¿Qué tratamientos existen?
El tratamiento de la hiperhidrosis localizada consiste en primer lugar en la aplicación de soluciones antiperspirantes que contienen sales de aluminio. Normalmente este tratamiento es ineficaz. Otro tratamiento es la iontoforesis, que requiere sesiones diarias aplicando una corriente galvánica.
La inyección intradérmica de toxina botulínica (botox / azzalure / boccoture) es un tratamiento muy eficaz que se aplica cuando han fracasado los tratamientos tópicos. Actúa bloqueando la liberación de acetilcolina de las fibras nerviosas que inervan y estimulan las glándulas sudoríparas ecrinas. Este procedimiento se realiza de forma ambulatoria y la duración del efecto oscila entre 5-12 meses. Recientemente (J Am Acad Dermatol 2014;70:1083-7) se ha comprobado que la repetición de la administración de la toxina botulínica en pacientes con exceso de sudoración palmar aumenta de forma significativa su duración. Este procedimiento no produce hiperhidrosis compensatoria a diferencia de la simpatectomía transtorácica, método quirúrgico que se utiliza solo en casos severos y no respondedores a otros tratamientos.
Hoy día podemos considerar al tratamiento con toxina botulínica como altamente eficaz y seguro en el manejo del exceso de sudoración localizada con repercusión en la calidad de vida del paciente.