Rosácea y cuperosis: luz y láser para su tratamiento
La rosácea es una enfermedad inflamatoria crónica que se puede manifestar bajo diferentes formas clínicas y que incluye una combinación de síntomas y signos como el enrojecimiento facial, flushing, telangiectasias o venillas, edema, lesiones papulopustulosas, lesiones protruyentes o fimatosas y lesiones oculares (conjuntivitis, blefaritis,…). Hablamos de cuperosis cuando nos referimos a la forma inicial de la rosácea caracterizada por enrojecimiento de la piel de la cara.
Es una entidad muy frecuente pudiendo afectar hasta el 10% de la población. Es más frecuente en mujeres y en edades medias de la vida. En los países europeos y nórdicos es más prevalente.
El láser y las fuentes lumínicas se están utilizando de forma eficaz para el tratamiento de distintos síntomas y signos de la cuperosis y de la rosácea con resultados muy satisfactorios.
El enrojecimiento, el flushing (enrojecimiento súbito) y las lesiones vasculares telangiectásicas se tratan de forma eficaz con sistemas láser y fuentes de luz (láseres vasculares), pero también el componente fimatoso (rinofima,…) se puede eliminar de forma eficaz con otros sistemas láser (láseres ablativos) . Además recientemente se están utilizando sistemas lumínicos para tratar las formas activas papulopustulosas de la rosácea. El tipo de láser y fuente lumínica a utilizar dependerá del tipo de lesión y diana a tratar.
Láseres y Fuentes de Luz más útiles en la Cuperosis y Rosácea:
- •IPL o Sistemas de Luz Intensa Pulsada:
A diferencia de los láseres, los IPL son sistemas lumínicos que emiten una luz policromática no coherente con longitudes de onda entre 500 y 1200 nm. Para el tratamiento de lesiones vasculares se suelen utilizar filtros de corte en el rango de 550-570 nm. Son sistemas muy versátiles pero que requieren mayor aprendizaje y experiencia del profesional médico.
Quizás sea la terapia lumínica de mayor eficacia y utilidad en el tratamiento de la rosácea en general. Ha demostrado eficacia en la eliminación de telangiectasias, eritema e incluso en lesiones inflamatorias de rosácea (papulopustulosas).
- •Terapia Biofotónica:
Es una nuevo tratamiento que aplica un gel sobre la piel del paciente que contiene unos cromóforos o sustancias que se activan con una luz led externa y emiten luz fluorescente en la piel. Se han aprobado recientemente para el tratamiento de la rosácea. Consigue mejorías importantes en las lesiones inflamatorias de la rosácea pero también en la hinchazón, edema y enrojecimiento de la piel y la sintomatología que produce. Se realiza de forma ambulatoria el tratamiento en 1-2 sesiones semanales durante 3-5 semanas. Permite la incorporación inmediata al trabajo sin efectos adversos significativos. Estos sistemas además estimulan la producción de colágeno en la piel y tienen un efecto fotorrejuvenedor.
- •Láseres de Colorantes pulsado 595 nm y de 532 nm
Se utilizan de forma eficaz para eliminar pequeñas telangiectasias o capilares superficiales en 1-3 sesiones.
- •Láseres de Nd YAG 1064 nm y diodos de 980 nm:
Son útiles para eliminar vasos capilares más profundos o de mayor tamaño. Es importante manejarlos con precisión para evitar marcas o pequeñas cicatrices.
- •Láseres ablativos de CO2 (10600 nm) y de Erbio (2940 nm):
Son sistemas que eliminan el tejido redundante. Son los láseres de elección cuando tenemos lesiones de rosácea fimatosa, como el rinofima, mentofima u otros. Nos permiten eliminar el tejido inestético hipertrófico de forma muy precisa y sin dejar cicatrices. Requieren unos cuidados pre y postratamiento adecuados para conseguir resultados óptimos.
Conclusiones
Los sistemas láser y fuentes de luz son un procedimiento cada vez más utilizado para los distintos síntomas y signos clínicos de la rosácea. Son de gran utilidad y muchas veces el único sistema para eliminar las alteraciones de la rosácea. Los sistemas IPL y láseres vasculares son fundamentales y muy eficaces en la eliminación de las alteraciones vasculares de la rosácea mientras que los sistemas ablativos de CO2 y Erbio son el mejor sistema de eliminar las formas fimatosas. En las formas papulopustulosas y brotes activos de rosácea se ha aplicado con resultados satisfactorios sistemas de IPL y más recientemente la Terapia Biofotónica que además permite rejuvenecer la piel.