Piel mixta: soluciones para sus problemas

Ni grasa ni seca: la piel mixta está a medio camino y reúne características de ambas, lo que incluye también los problemas de estos dos tipos de cutis. Aunque es muy común, sí que presenta debilidades que hacen ciertamente complejo su tratamiento diario. ¿Tienes la piel mixta? Vamos a identificar sus afecciones más comunes y, sobre todo, te vamos a proponer soluciones para que luches contra ellas.

Primero debes saber cómo es tu tipo de piel. Si te has reconocido dentro de la mixta, va siendo hora de que tomes nota. Las características de este cutis son también sus problemas por lo que podemos hablar de una piel bastante conflictiva:

– Zona T (frente, nariz y barbilla) grasas frente a mejillas secas.

– En esa misma zona T suele ser frecuente la presencia de granitos y puntos negros.

– Al intentar contrarrestar la grasa de esas áreas concretas se utilizan productos que secan las mejillas, que según los casos pueden llegar a descamarse.

– Lo mismo sucede al intentar hidratar las mejillas: engrasamos la otra zona.

– Las pieles mixtas suelen coincidir muchas veces con la piel sensible, por lo que se juntan con los problemas de ésta también. Así, aparecen las rojeces, capilares débiles y tendencia a las lesiones vasculares.

La piel mixta requiere un protocolo de belleza distinto al de la grasa y la seca al ser una combinación de ambas. Quizá lo más obvio sería pensar en cuidar la zona seca por un lado con un producto específico, y la grasa por otro. Como la anterior opción es un poco engorrosa, es mejor que utilices productos especiales para pieles mixtas que aportan hidratación pero también compensan la producción de sebo.

La hidratación es muy importante en las pieles mixtas dado que la zona grasa también puede estar deshidratada. Tienes que buscar un producto de textura fluida y ligera libre de aceites que engrasen más. Pero, ¿Qué pasa en verano? ¿me brillará más la piel?

El Dr. José Luis López Estebaranz, director de la Clínica Dermomedic de Madrid, en colaboración con Bioderma, nos ayuda a mantener la piel perfecta en todo momento gracias a sus trucos para lucir una piel mate, sin brillos, durante las vacaciones sin renunciar a la hidratación.

Seguramente, si tienes la piel mixta, notes como en verano el exceso de brillo en el rostro y los poros abiertos  se convierten en tu principal batalla estética. Esto se debe a que estás más expuesta al sol (tomes o no el sol), el sudor y aplicación de cremas solares que quizás no son las más indicadas en tu tipo de piel.

¿Cómo podemos cuidar o tratar la piel mixta?

Primer paso: limpieza profunda del rostro

“Para paliar el oil-effect no deseado, la rutina de limpieza tiene que ser un básico. De hecho, sería importante realizarla dos veces al día, con soluciones no iónicas, que no sean agresivas para la barrera cutánea. Ojo: que la limpieza sea importante no tiene que confundirse con realizar lavados excesivos, ya que podemos debilitar mucho el manto hidrolipídico”, señala el director de Dermomedic.

¿Qué cremas deben usar las pieles mixtas?

“Aquellas que estén formuladas con principios activos matificantes / anti-brillos como el Bakuchiol, que reestablece la composición del sebo de forma duradera. Productos, al fin y al cabo, astringentes, que controlen el exceso de sebo y restauren la barrera lipídica. Además, siempre es necesario utilizar un filtro solar y, en el caso de las pieles mixtas y grasas, no comedogénico, de amplio espectro, de textura fluida, no grasa. De esta manera lucirá una piel mate, completamente protegida y sin brillos”, aconseja el Dr. López Estebaranz.

La manera de aplicarte tu hidratante también ayudará a compensar la zona seca con la grasa. Empieza extendiendo el producto en las mejillas primero, masajeando hasta que se absorba casi en su totalidad. Después, extiende lo que te sobre por la frente, nariz y barbilla para que no haya exceso. Para mejor conocimiento de esto conoce el multimasking, la última tendencia en belleza que consiste en aplicar distintas mascarillas en función de la zona.

En cuanto a los trucos para el maquillaje, los más importantes son evitar las bases con aceite y apostar por aquellas con acabado en mate, así como la utilización de los polvos traslúcidos, que no solo logran controlar los brillos, sino que ademán consiguen sellar el maquillaje y prolongar su duración.