ELIMINACION DE TATUAJES
Según el diccionario de la Real Academia Española, tatuar es grabar dibujos en la piel humana, introduciendo materias colorantes bajo la epidermis, por las punzadas o picaduras previamente dispuestas.
De esta forma se modifica el cuerpo, alterando temporal o permanentemente el color de la piel.
Los tatuajes llevan realizándose desde hace siglos y en la actualidad el 30% de la población mundial tiene al menos un tatuaje. De ese porcentaje, el 72% de las personas tatuadas no se ha arrepentido. Sin embargo, el 28% restante desea eliminarse los dibujos y esto ha hecho que las técnicas para conseguirlo se hayan vuelto más efectivas y asequibles económicamente.
Existen diferentes métodos para la eliminación de tatuajes como son las inyecciones de acido láctico o el láser co2 pero el único método demostrado científicamente capaz de eliminar los tatuajes sin dejar ningún tipo de marca ni cicatriz en la dermis es el láser q-swich.
Este láser emplea dos longitudes de onda (1064 nm para colores negros y KTP 532nm para colores rojo amarillo naranja y morado). Su mecanismo de acción se basa en la fototermolisis selectiva actuando específicamente sobre el pigmento y respetando al máximo el tejido circundante. Este láser emite pulsos de alta intensidad en un breve espacio de tiempo del orden de nanosegundos, gracias a la rapidez del pulso conseguimos una mayor efectividad y un menos daño dérmico.
Existen varios factores para poder predecir un numero aproximado de sesiones, todo dependerá de:
1º Localización del tatuaje: aquellas zonas del cuerpo ricas en ganglios linfáticos como pecho, cuello, axiles e ingles necesitarán un menor número de sesiones. Zonas distales como tobillos o muñecas requerirán de un mayor numero de sesiones.
2º Tatuajes monocromados o policromados: Un tatuaje monocromado siempre va a necesitar para su eliminación de un menor número de sesiones ya que el tamaño de sus partículas es menor que las tintas de colores. Los tatuajes multicolor que incluyen colores como el rojo, naranja y morado serán loas mas fáciles de eliminar, por lo contrario el azul turquesa y verde son los más costosos. Para ello somos la clínica que dispone en exclsuiva del nuevo láser Q-swich de Rubi incorporado a nuestra clínica específicamente para los colores azul turquesa y verde.
3º Cantidad de pigmento: Tatuajes amateurs con tamaños entre los 2.48cm2 debido a su menor densidad de pigmento se eliminarán mucho antes que los tatuajes profesionales con más de 200cm2 de densidad de tinta.
4º Presencia de fibrosis o cicatrices en el tatuaje. En este caso vamos a necesitar de un mayor número de sesiones ya que el pigmento se encuentra en el interior de la dermis protegido por una barrera de fibrosis que impide y dificulta la acción del láser y del sistema inmunitario. Gracias a nuestra experiencia podemos asegurar a nuestros pacientes el borrado completo de los tatuajes aunque dispongan de estas dificultades.
Podemos indicar que necesitamos una media de entre 4/6 sesiones en tatuajes monocromados y una media entre 6/8 sesiones en tatuajes policromados. Las sesiones recomendamos realizarlas cada 45/60 dias, con esto conseguiremos que la piel se regenere entre sesión y sesión y dar suficiente tiempo a nuestro sistema linfático para que de manera progresiva ir eliminando los pigmentos por medio de los vasos y ganglios linfáticos y a través de las heces y orina.
La duración de la sesión varía en función del tamaño de tatuaje, tatuajes de tamaños inferiores a 10×10 cm tendrán una duración de menos de 2 minutos, los tatuajes con mayor tamaño podemos tardar hasta 15 minutos en el mayor de los casos.
Inmediatamente después del tratamiento se observa un escarchado o frosting que produce un efecto óptico temporal de borrado del tatuaje como resultado del calentamiento y la combustión del cromóforo, la zona alrededor del tatuaje puede presentar un pequeño heritema o leve inflamación, esto es totalmente normal y los efectos secundarios desaparecerán pasados 3-4 dias del tratamiento. Los resultados visibles los podremos obtener pasadas 3-4 semanas desde la sesión de borrado de tatuaje. Inmediátamente después de cada tratamiento procederemos a aplicar una pomada antiinflamatoria y a realizar un vendaje de manera oclusiva para evitar riesgos de infecciones y rozaduras, si no cubrimos la zona y aplicamos crema regeneradora a diario podríamos provocar una infección y como consecuencia una mala cicatrización en el tatuaje.