Alopecia areata: Tratamiento efectivo con láser de excímeros
La alopecia areata es una enfermedad que consiste en la caída de cabello y que causa una importante alteración en la calidad de vida del que la padece.
Tiene una causa autoinmune, es decir, las defensas de nuestro cuerpo atacan el folículo piloso determinando la caída del pelo.
Aunque se desconocen los motivos exactos que la provocan, se ha observado cierta predisposición familiar y suele existir un factor desencadenante, relacionado directamente con el estrés.
Hay varios patrones clínicos de alopecia areata, desde la aparición de unas pocas placas redondeadas hasta la alopecia universal.
Su duración también es muy variable, desde meses hasta años, lo que produce frecuentes recaídas tras la retirada del tratamiento.
Tradicionalmente se ha tratado con fármacos antiinflamatorios, bien de manera local, como cremas o lociones de corticoides, infiltrados y en casos más extensos corticoides orales.
En pacientes con alopecia más grave o refractaria, pueden ser necesarios otro tipo de fármacos inmunosupresores, fármacos que actúan sobre nuestras defensas, inhibiendo en cierta medida su efecto.
Tratamiento de la Alopecia areata con láser de excímeros (308 nm).
A los tratamientos habituales de la alopecia areata se ha unido últimamente la terapia con láser de excímeros.
Se trata de un tipo de láser ultravioleta cuya potente luz se suele absorber en la primera mil millonésima de metro (nanómetro) del tejido sobre el que incide. El avance está en que este láser emite exclusivamente en una longitud de onda de 308 nm. y con una potencia 100 veces superior a las cabinas de UVB.
En la alopecia reduce la actividad de ciertas macrófagos, permitiendo así que se reinicie el ciclo de crecimiento del cabello.
Se hacen sesiones semanales sin efectos adversos y permitiendo vida normal a los pacientes.
Tras 15 sesiones los resultados son muy satisfactorios.
El procedimiento con láser excímeros de 308 nm es factible, bien tolerado y seguro. Como el tratamiento se puede repetir, puede ser una solución para quienes padecen esta alopecia de forma crónica, porque permite controlar la caída de cabello nada más observarse los primeros síntomas, manteniéndola así bajo control.